lunes, agosto 9

La Cadillac 1a Parte

Estabamos en pleno invierno, en la ciudad de Chicago, especificamente en Elgin, Illinois, habia que viajar a Piedras Negras, Coahuila, pensabamos ponerle llantas Altas y anchas con unos rines espectaculares a la Cadillac, pero no lo hicimos, aunque ahi los teniamos, se nos fue el tiempo, mi Padre dijo no se vayan por Oklahoma, porque esta una tormenta de Hielo (si, de hielo !!), vayanse por el 35, que es mas largo pero por ahi el tiempo esta mejor, y como ya conociamos esa ruta y la del 35, la de Oklahoma nos ahorraba unas millas, que se reflejaban en tiempo, nos fuimos por la ruta Oklahoma, habia que partir muy temprano, la Cadillac estaba lista…

Salimos a eso de las 11 de la mañana, solo mi hermano Javier y yo, a pesar de que habia mucha nieve, ya ibamos en viaje, en Chicago la gente esta acostumbrada a manejar en esas circunstancias, ademas la City como dicen ahi, en cuanto cae nieve, echan sal a las carreteras y principales calles, para que la sal derrita la nieve y quede circulable, pero ese dia habia demasiada nieve, ya ibamos a la salida de Chicago, y se empezaba a vislumbrar lo que nos esperaba, para donde voltearas habia carros accidentados, patrullas, ambulancias, y de plano conductores que preferian salirse y parar un rato , en vez de continuar arriesgandose a manejar en esas circunstancias….

Pero aun asi decidimos arriesgar e irnos por la ruta de Oklahoma, cuanto mas avanzabamos era peor el panorama, llegando a San Luis Missouri, parecia que estabamos en el polo norte, muy oscuro, hielo, mas hielo, neblina y algo de miedo…

Pero decidimos continuar, entrando a Oklahoma, un estado donde no son frecuentes las nevadas, y por lo mismo la City no tiene guarniciones de sal, lo que tiraban es arena en vez de sal, en otros tramos si estaba limpio, pero imaginense hielo + arena = Autopista de la muerte.

Asi que habia que irse con calma, maximo 40 millas, no se podia avanzar mas, tampoco habia que frenar, el freno estaba casi prohibido, o girarias como si fueras en mantequilla.

Para donde voltearas el panorama era de miedo, el pasto parecia puntas de cristal cortado, los arboles partidos por el peso del hielo, los cables de luz parecian como los famosos bolis de hielo, y si, muchos accidentes, patrullas por doquier, a veces veiamos carros deportivos como camaros que iban a vuelta de rueda, para ellos era aun mas peligroso…

Lleo la tarde y la noche, llegamos a un suburbio del cual no recuerdo su nombre, buscariamos un hotel para esperar y dejar pasar el peligro, pero oh sorpresa, no encontramos lugar en ninguno, y vaya que el pueblo no era tan chico, ya sin opcion de hotel, los cuales estaban a llenar por los viajeros que prefirieron hospedarse y esperar a que pasase la tormenta, lo que hicimos es que nos dormimos en la camioneta, la cual mantuvimos con el motor encendido para mantener la calefaccion, en realidad dormimos junto a una gasolinera, todo era hielo, asi que dormimos sobre el hielo.

Ya despues de haber dormido unas 5 horas, decidimos desayunar, cruzamos la carretera en la cadillac, enfrente habia un restaurant, puro ranchero de oklahoma, con un ingles muy ranchero, nos estacionamos, habia que caminar unos 40 metros, pero que dificil fue caminarlos, pues era puro hielo, tardamos un poco en llegar a pie, mientras tanto veiamos como hasta camiones de volteo, o torton, se resbalaban en el hielo, como si fueran de juguete.

Desayunamos al estilo ranchero de oklahoma, y escuchamos en la radio que se venia otra tormenta peor, asi que decidimos mejor partir, pues no sabiamos hasta cuando podriamos salir de oklahoma si nos quedabamos esperando, ademas no habia otra opcion, pues no habia hoteles disponibles.

Mi padre nos llamaba a cada rato par preguntarnos como estabamos y darnos noticias de como se encontraba el clima en las ciudades por las cuales pasariamos mas adelante….

Esta historia continuara en el proximo post

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